Les contaba en enero, cuando reseñé Si no podemos viajar a la velocidad de la luz, de Kim Cho-yeop, que gracias a los k-dramas mi interés por Corea del Sur y su cultura no ha hecho más que aumentar en los últimos años. Es por ello por lo que cada nueva autora que llega traducida al español es una oportunidad excelente de seguir explorando el país gracias a su literatura. Por eso hoy quiero recomendarles Conejo maldito, de Bora Chung. Otra de mis lecturas del #LeoAutorasOct. Una colección de diez relatos cuya traducción al inglés quedó finalista del premio Booker Prize en 2022. Historias cortas en las que la ciencia ficción, la fantasía y el horror se entremezclan. Con relatos que parecen cuentos de hadas donde lo sobrenatural irrumpe la vida cotidiana y la cambia para siempre.
«Mi abuelo solía decir: “Los objetos que van a contener una maldición deben ser hermosos”».
Inicia el libro el relato que da nombre a la colección: Conejo maldito. La historia de cómo una familia acaba exterminada gracias a una lámpara con la forma de un conejo sentado debajo de un árbol. Un objeto que el abuelo de la protagonista creó para vengar la muerte de uno de sus amigos. Un cuento que además de tratar de objetos malditos, nos habla de negocios familiares, de clases sociales, de injusticias, de legados, y de la corrupción gubernamental vivida en Corea del Sur tras la guerra civil. Un relato fascinante que tiene un giro final asombroso. De mis favoritos del libro.
Le sigue La cabeza, quizás la historia más bizarra o weird la colección. El relato de una mujer que ve como toda su vida se transforma cuando una cabeza asoma del retrete que acaba de usar y la llama mamá. No les puedo contar nada más, es mejor que lo descubran al leer. Hay tanta crítica social a los roles que se impone a las mujeres bajo ese relato tan extraño que vale la pena leerlo sin saber mucho que esperar. Después encontraremos Los dedos fríos en la que una mujer despierta en medio de una negrura total sin recordar quién es ella o cómo ha llegado allí. Una historia de celos y envidia que mantiene la intriga en todo momento y que tiene un final que los sorprenderá.
«—Si tomas anticonceptivos durante mucho tiempo y tu cuerpo tiene alguna anomalía, puedes quedarte embarazada como efecto secundario».
La regla nos narra la vida de una joven que empieza a tener problemas con su periodo y aunque un principio no quiere ir al ginecólogo porque aún es joven y virgen, se ve obligada a buscar ayuda cuando su periodo no termina de irse luego de veinte días. Como resultado le recetan la píldora anticonceptiva, y para sorpresa del lector, al pasar meses tomándola termina por quedar embarazada aún sin haber tenido relaciones sexuales. Así, empieza la que todos llaman la búsqueda de un padre para ese hijo que lleva en el vientre. Porque si no puede enfrentar consecuencias muy desagradables. Un relato sobre los estigmas de ser madre soltera en un país como Corea, tanto para el niño como para la mujer que decide serlo. Brillante.
Adiós, amor mío es un relato de ciencia ficción en el que nos cuentan cómo un hombre que se dedica a probar y desarrollar androides se enamora de su primer robot. Con el paso de los años ese Modelo 1 deja de funcionar correctamente y él busca alternativas con el fin de transferir esos recuerdos de su compañera artificial a nuevos modelos. Pues cada vez los robots son más y más eficientes. Un relato que parece más clásico pero con un final que lo hace maravilloso.
«Era mi creación, una compañera hecha con mis propias manos. Un ser que existía, de la cabeza a los pies solo para mí, alguien que era, a falta de una forma mejor de expresarlo, completa y absolutamente “mía”».
La trampa, es uno de los relatos que parece directamente un cuento de hadas ambientado en Corea. La historia de un hombre que encuentra un zorro atrapado en una trampa y nota como la sangre que fluye de su herida es oro. Y lejos de liberarlo, a pesar de que el animal le dice “ayúdame” una sola vez, lo encierra y mantiene herido con el objetivo de acumular riquezas. Incluso se hace tan próspero que puede casarse y tener hijos. Pero su avaricia no conoce límites, y pronto descubrirá que para mantener su estatus tendrá que sacrificar algo que está muy dispuesto a entregar, pero sin imaginar las consecuencias. Un cuento muy inquietante que se vuelve más y más oscuro mientras leemos.
Le sigue Cicatrices, donde conoceremos a un niño que termina encerrado en una cueva. En completa oscuridad, sin contacto humano. Sufriendo atroces heridas provocadas por un ser que no puede ver, que lo visita regularmente para alimentarse de él, aunque nunca lo hiere dos veces en el mismo lugar. Si desea sobrevivir tendrá que escapar, pero quizás el mundo exterior no le trate mucho mejor que la cueva. Otro relato que parece un cuento de hadas macabro y que tienen un final que no te ves llegar.
«El sustento de la pareja dependía de su hogar. Y para ella significaba mucho más que una fuente de ingresos. Ese edificio era todo cuanto tenía después de dejarse la piel durante años batallando contra el mundo».
A continuación, encontramos otro de mis relatos favoritos del libro: Mi dulce hogar, en el que una pareja que lleva ocho años casada decide vender el apartamento que tenían ahora que lo acaban de pagar, y comprar un edificio en otra zona de la ciudad. Porque esa vida de lujos y apariencias a la que parece que todos aspiran no es realmente para ellos Sin embargo, ese pequeño edificio de cuatro plantas que en teoría les permitiría vivir el tipo de vida tranquila que siempre habían querido llevar, no hace sino crearles más y más problemas. Solo que quizás, el mismo lugar se encargará de eliminar esas preocupaciones. Una narración alucinante que te sorprende una y otra vez, (no puedo dejar de pensar en el final) y que nos habla del capitalismo y todos esos sueños que parece que tenemos que cumplir para ser exitosos.
El amo del viento y la tierra nos lleva a un reino en el desierto, en el que un monarca poderoso se quiere enfrentar a un guerrero y hechicero que navega en el barco volador construido de engranajes dorados. Como consecuencia termina por recibir una maldición: todos sus descendientes quedarán lisiados. Por ese motivo la princesa que debe casarse con el príncipe heredero, un joven ciego desde su nacimiento, se adentra en el desierto para tratar de romper su maldición. Una historia muy bonita y con tintes de cuentos de hadas que nos habla sobre la ambición y maldiciones difíciles de romper.
«No creía que fuese a tener un futuro prometedor. Ni siquiera estaba segura de si sería capaz de ganarme la vida. Por eso, sentía que el pasado siempre había sido mejor que el presente y que el ahora era mejor que los días que estaban por llegar».
Termina el libro El reencuentro, en el que una mujer coreana se encuentra terminando su posgrado en Polonia entabla una relación con un local. Un hombre que, al igual que ella, puede ver un fantasma que deambula en una plaza en la que ambos se encuentran por casualidad. Una historia de fantasmas, de futuros inciertos, de deseos, de guerra, y sobre traumas generacionales y cómo condicionan nuestra existencia. Un cierre perfecto para la colección.
Fantasmas, maldiciones, robots, cuentos de hadas macabros… Conejo maldito, de Bora Chung es una colección de relatos llena de crítica social y de capas y más capas de lectura. En la que la autora pone de manifiesto no solo las presiones que sufren las mujeres en una sociedad tan conservadora como la coreana, sino también lo que hace el capitalismo en las familias en general. Me asombró muy gratamente la capacidad que tiene la escritora para escribir finales que te sorprenden una y otra vez, que transforman sus relatos, de manera que no puedas dejar de pensar en ellos. Y como hace uso de lo extraño con el objetivo de crear historias retorcidas que se salen de lo común. Si están buscando una colección de relatos que le vuelen la cabeza tienen que darle una oportunidad.
¿Han leído Conejo maldito? ¿Les llama la atención?
No hay comentarios :
Publicar un comentario