La redención de Rosalera, de Tade Thompson

 

¿Qué ocurriría si los alienígenas se instalarán entre nosotros? Imaginen cómo sería vivir en una ciudad que creció en torno a una criatura extraterrestre capaz de curar a cualquiera que sufra heridas o enfermedades, sin importar su gravedad. ¿Qué pasaría si ese lugar milagroso se declara una ciudad Estado independiente? ¿Y si lo que parecía un acuerdo beneficioso entre alienígenas y los ciudadanos de esa joven nación esconde un peligro mayor de lo que nadie pueda sospechar? Hoy quiero hablarles de La redención de Rosalera, de Tade Thompson, el último libro en la espectacular Trilogía de Ajenjo. Unas novelas adictivas que llevan el primer contacto alienígena a Nigeria y que se publican en español con la cuidada traducción de Raúl García Campos.

«Soy Oyin Da, la improbable, y estos son los últimos días de Rosalera».

Nos encontramos nuevamente en Rosalera, en el año 2068, aproximadamente un año después de lo narrado en La insurrección de Rosalera. Así que, si no han leído los dos libros anteriores, no es buena idea seguir leyendo esta reseña porque, aunque no contiene spoilers del tercer libro, sí que puede adelantar la trama de los primeros dos. Si están buscando ciencia ficción llena de sentido de la maravilla y muy original tienen que darle una oportunidad. Porque que el primer contacto de una raza alienígena se desarrolle en Nigeria es algo que no se ha explorado antes y el resultado es espectacular. Pueden leer mis reseñas aquí Rosalera y aquí La insurrección de Rosalera.

Ahora que la urbe que creció alrededor de la cúpula de Ajenjo (el alienígena capaz de curar a todo aquel que se encontrase en las inmediaciones de su bóveda) es una ciudad Estado independiente en constante crecimiento, los problemas no se han eliminado. Si bien es cierto que tras la violenta guerra lograron su independencia de Nigeria, el país vecino no deja de querer volver a controlar a Rosalera y su prosperidad. Así mismo, la alianza entre el alcalde, Jack Jacques, y los seres llegados del espacio cada vez está en mayor peligro.

Lo que parecía un acuerdo beneficioso tanto para los extraterrestres como para los ciudadanos de Rosalera (curación para todos, energía ilimitada y progreso, a cambio de que los alienígenas puedan habitar los cuerpos de los difuntos de la ciudad), empieza a ser cuestionado. Especialmente cuando los habitantes de la urbe descubran que quizá no saben toda la verdad sobre los reanimados. Y como si fuese poco, algunos extraterrestres ya en cuerpos humanos, los llamados hogarícolas, comienzan a perpetrar matanzas para acelerar así el proceso de llegada de los suyos a Tierra. De manera que la frágil paz en la que vive la ciudad se empezará a resquebrajar aún más.

«Para entender el futuro, antes debemos entender el pasado, no solo porque nos aporta contexto sino también porque en él se esconden las semillas de la catástrofe».

A todo esto tenemos que sumar que quizás establecer un acuerdo con los hogarícolas fue el primer error. Es por ello por lo que Karoo, su antigua jefa Femi, y Oyin Da, a la que conocemos como la Chica de la Bicicleta, tienen que convertirse en la última línea de defensa de la humanidad. Y hacer todo lo necesario, aunque sea impensable, para evitar que lo que no parece una invasión alienígena, acabe con todos los humanos y lo que conocemos.

En esta tercera entrega, como en la anterior, Thompson apuesta por darnos una narración coral en la que acompañaremos a un nutrido grupo de protagonistas mientras tienen que lidiar con los múltiples conflictos de la ciudad y una serie gigantesca de amenazas. Guerras entre bandas, delincuencia descontrolada, matanzas cometidas por alienígenas locos que habitan cuerpos humanos, las constantes amenazas de Nigeria de quitar la soberanía de la ciudad Estado, una posible una guerra civil, el descontento generalizado cada vez mayor. Y la más peligrosa de todas: la extinción irremediable de la humanidad ante una amenaza silenciosa que no parece tal.

«Puede que estuviera equivocado con respecto a Rosalera. No era el paraíso de la sanación que quieren vendernos. Es un cáncer que poco a poco devorará a la especie humana, hasta que acabe por extinguirla».

Alienígenas, guerra, política, invasiones, genocidios, sacrificios… La redención de Rosalera, de Tade Thompson, es un final más que a la altura de una trilogía espectacular. Una que fue mejorando en cada entrega. Que tiene un mundo imaginativo y lleno de sentido de la maravilla, con elementos muy originales. Que, además, hace crítica social y nos habla del colonialismo y sus consecuencias, del racismo, de la homofobia. Si están buscando ciencia ficción adictiva y repleta de ideas tienen que darle una oportunidad a esta trilogía.

¿Han leído La redención de Rosalera? ¿Les llama la atención?