El verde entre las sombras, de Rodolfo Martínez

 

Nada mejor que volver a un mundo que has podido explorar solo de manera superficial para seguir descubriendo sus secretos, ahora con mayor profundidad. Hoy quiero hablarles de El verde entre las sombras, de Rodolfo Martínez. El segundo libro en la serie El Hueco al Final del Mundo. Novelas en las que ciencia ficción y fantasía se unen para presentarnos a un universo rico y original. Uno que se enfrenta a un peligro que amenaza con acabar con todo y todos.

«La viruta. El trozo infinitesimal de pura realidad que había quedado en Duniya cuando el resto de la Esquirla regresó a la urdimbre».

Si aún no conocen Duniya, y no han leído La simiente de la Esquirla, es mejor que no sigan leyendo la reseña porque puede contener spoilers de ese libro. Esta segunda parte es una continuación directa de la anterior. Lo mejor es que conozcan primero a Kláiner e Ibyra, así como su alucinante mundo (les dejo por aquí mi reseña). Luego ya pueden regresar.

Dividido en dos partes, en la primera nos reencontramos con Ibyra. La joven que tras pasar un tiempo con Kláiner había regresado a Iratembe, se ve obligada (por las acciones de su hermano y lo que sea que lo acompaña) a huir de la capital. Para lograr mantenerse con vida deberá contar con la ayuda de unos inesperados aliados. Pero sus socios no le pondrán las cosas fáciles: hay una larga relación de desconfianza entre sus pueblos, así que deberá demostrar que no es solo una niña mimada como todos parecen creer, sino mucho más.

«Nadie como ella sabía tratar la molécula de la vida, reordenar sus bases nitrogenadas, usar el alfabeto de Dios para el más noble de todos los propósitos: la creación de vida cada vez más versátil, más resistente, más duradera».

Pero no solo Ibyra será nuestra narradora en esta primera parte. Podremos visitar diferentes regiones del Duniya y descubrir personajes tan interesantes como Ombi, una Regularizadora del Cilindro Maestro, que desde Irembe nos permite ver cómo va cambiando todo desde que Barú asciende al poder. O la misteriosa e interesante Kif, una especie de científica que en Yajim ha manipulado la Viruta para crear seres alucinantes.

La segunda parte del libro nos llevará de nuevo junto a Kláiner, que partió de Elantegnek para buscar y ayudar a Ibyra, pero quien pronto se verá inmerso en una encrucijada. Decidir si debe seguir buscando a la joven que probablemente no necesite su ayuda, o si asume la extraña misión que le es encomendada. Evitar que lo que sea que ha entrado a esa realidad acabe con todos. Cerrar el desgarrón que puede acabar quizá con el multiverso. El joven, que siempre estuvo solo, se encuentra un camino plagado de peligros pero también a un grupo de aliados, cada uno más entrañable que el anterior (mención especial al adorable Utbrik). Todo ello mientras que en su hogar sigue inmerso en su restructuración guiada por Cegé, lleno de nuevos y terribles peligros.

«Poner en marcha una revolución era fácil. Guiarla al lugar adecuado era un asunto muy distinto. Evitar el derramamiento de sangre inocente en el proceso resultaba casi imposible».

Supervivencia, guerras, revoluciones, intrigas, experimentos, peligros, amistad… El verde entre las sombras, de Rodolfo Martínez, es una novela repleta de aventuras y descubrimientos. Un libro en el que veremos evolucionar a nuestros protagonistas. Que además nos permite explorar ese complejo mundo creado por Martínez repleto de seres y culturas alucinantes, cada una con sus propias costumbres, tradiciones e idiomas. Ya tengo ganas de leer el tercer volumen: El festival de la carne trémula, y ese final que nos espera luego en El rostro del vacío, la cuarta y última parte. Si están buscando una novela con un universo y unos personajes fascinantes, El Hueco al Final del Mundo es una excelente opción.

¿Han leído El verde entre las sombras? ¿Les llama la atención?