Reseña: El Rithmatista

Autor: Brandon Sanderson.
Traducción: Albert Solé.
Título: El Rithmatista.
Editorial: Ediciones B.
ISBN: 9788466655866.
Páginas: 448.
Precio:  19,00 €

Sinopsis:

Más que nada en la vida, Joel quiere ser uno de los Rithmatista. Elegidos en una misteriosa ceremonia, estos tienen el poder de infundir vida a figuras bidimensionales y, además, son la única defensa de la humanidad contra unas despiadadas criaturas que amenazan todas las islas americanas dejando un reguero de cadáveres a su paso.

Pero cuando varios estudiantes para Rithmatista empiezan a desaparecer, con visibles muestras de violencia física, Joel es designado como ayudante del profesor que investiga dichos casos. De pronto, el chico se encuentra tras la pista de un descubrimiento inesperado, que cambiará su mundo para siempre.

Opinión personal:

¿Qué pasaría si las cosas que dibujamos pudiesen cobrar vida? Y si ¿sólo unos trazos de tizas pudieran ser lo único que nos defiendan de unos seres bidimensionales que pueden incluso matar? Imaginen que vivimos en un mundo donde no todos pueden hacer que sus dibujos tengan poder y necesitamos de un grupo especial que estudia desde los ocho años la forma de mantener alejado el peligro del resto. Todo esto y más es El Rithmatista, una de las últimas novelas publicadas de Brandon Sanderson en nuestro país.

"¿De qué sirve tener amigos si de vez en cuando no los pones en situación de peligro de muerte?"

Brandon Sanderson tiene un don para contar historias. Te narra y explica los orígenes de la Rithmática, el arte de dibujar líneas con diferentes poderes, a través de una conversación de dos compañeros de clases de manera que sea divertido. Así se nos presenta a los Tizoides, unas criaturas bidimensionales creadas a partir de tiza y que pueden ser mortales.

Dividido en tres partes; en la primera nos dedicaremos a conocer a Joel, un joven de 16 años que se encuentra estudiando en una de las ocho prestigiosas academias Rithmáticas, pero él no es un Rithmatista, sino que se encuentra estudiando en el campus general, dedicada a los estudiantes sin el don, muchos de sus compañeros son niños ricos, pero no en el caso de Joel, a quien se le permite estudiar allí en calidad de hijo de uno de los trabajadores, pues su madre es una de las encargadas de la limpieza. Así que nuestro protagonista se siente ignorado por su origen, no incluido entre la élite formada por los estudiantes de rithmática, pero tampoco un igual entre los estudiantes adinerados. 

La novela se encuentra ambientada en el siglo XX, en una América alternativa, cuya principal característica es que no se encuentra formada por un sólo territorio, sino por un grupo de 60 islas independientes y con autonomía. Donde se escribe en pergaminos usando plumas de aves, pero que también cuenta con ingenios mecánicos tan avanzados como animales mecánicos que cortan la hierba y los resortrenes, una especie de trenes que no viajan por el suelo, lo que sería poco práctico para comunicar las diferentes islas, sino que lo hace por el aire, al mejor estilo de los teleféricos. Un mundo donde Asia conquistó Europa, y Suramérica es un solo país dominado por los aztecas. 

La Academia Armedios, se encarga de formar a los próximos defensores, pues las Islas Unidas se encuentran en guerra con los tizoides salvajes, una guerra de la que se sabe muy poco, porque como casi todo lo que tienen que ver con los rithmatistas se guarda con celo de la población general. Es allí donde estudia Joel, ignorando hasta el descuido sus clases, mientras trata de aprender tanto como puede de la rithmática.

Es en parte por este interés de Joel con todo lo que tiene que ver con la Rithmática, que se verá atrapado en medio de una investigación que busca esclarecer que está pasando con las desapariciones de los jóvenes rithmatistas. 

Pero Joel no estará solo, nos encontraremos a Melody, una chica de su edad que no quiere ser Rithmatista, a diferencia de Joel que no anhela otra cosa. Un personaje con mucha disposición al dramatismo, pero que termina siendo uno de los más divertidos y ocurrentes.

Otro personaje entrañable es el profesor Fitch, quien se convertirá en el mentor de Joel, un individuo entre lo cómico y lo ingenuo, que termina aprendiendo tanto de sus alumnos, como Melody y Joel de él. Su némesis, el nuevo profesor Nalizar, es un héroe de guerra que llega a la academia con ansias de poder y que será uno de esos personajes de lo que no sabes nunca qué pensar.

Las descripciones de los lugares son cortas pero efectivas, Sanderson tiene un estilo de narración en apariencia sencillo, pero muy visual, por lo que imaginarte los escenarios y hasta las expresiones de los personajes resulta muy fácil.

El Rithmatista  tiene una serie de reflexiones de lo más interesantes: sobre el poder y cómo nos puede cambiar, la importancia de los estudios, o el de no avergonzarnos por lo que somos, consejos que recibe el protagonista pero que podemos aplicar todos, sin importar la edad.

Que se considere a  Da Vinci un santo, es otra de esas cosas que logró hacerme sonreír, aquí Sanderson creó su propia religión, la Iglesia Monárquica, una que basa su poder en la rithmática, donde es El Maestro quien decide quién son los elegidos a los 8 años como próximos rithmatistas, y que convive con otras como la musulmana, los cristianos y los budistas.

Quizás la parte que me parece poco creíble en el libro, no sea las criaturas de tizas que cobran vida, sino que a un joven de 16 años que no tiene ningún estatus se lo considere un ayudante para un caso de investigación, y se le permita visitar escenas de crímenes donde los cadáveres acaban de ser retirados, por más que su opinión sea muy valorada por el profesor e incluso por la policía. Joel es muy inteligente y observador, y al parecer mucho más listo que todos los adultos de alrededor, pero para mí, es una situación poco verosímil.

La novela viene acompaña de un mapa, más lleno de detalles de lo que parece a simple vista y además viene repleto de diagramas para explicarnos las diferentes defensas, pero no solo eso, cada inicio de capítulo cuenta con un dibujo magnífico y los números de páginas vienen dentro de un pequeño engranaje.

Un inicio de serie que promete muchas aventuras, con un sistema de magia original; un mundo repleto de secretos de los que solo hemos visto una pequeña parte, porque Sanderson es un maestro de los giros argumentales y nada termina como creemos que lo hará. Tengo muchísimas ganas de seguir las aventuras de Joel y Melody, y de conocer qué se esconde realmente en Nebrask o en los mismos pasillos de la academia.