Cartas de amor a los muertos, de Ava Dellaira

Cuántas páginas se habrán escrito tratando de describir cómo se siente una persona cuando alguien que ama ya no está más aquí; pero Cartas de amor a los muertos de Ava Dellaira no es solo un libro sobre una joven que acaba de perder a su hermana mayor y mejor amiga, es sobre cartas escritas a personas que ya no están para celebrar su vida y que en algún momento estuvieron allí.

“Hay ciertas cosas que no puedo contar a nadie, excepto a la gente que ya no ésta aquí”.

Lauren es una joven que al iniciar el libro, había perdido a su hermana mayor hace seis meses y decide cambiar de instituto para así poder empezar de nuevo, sin las miradas de compasión que todos los que conocían a May iban a dedicarle, pero sobre todo para evitar preguntas para las cuales no tiene verdaderas respuestas. Durante la clase de lengua su profesora les pide a todos que escriban una carta a alguien que haya muerto y Lauren decide escribirle a Kurt Cobain, el cantante favorito de su hermana, un personaje con el que siente que de verdad puede hablar.

Es así como se inician las cartas que serán el modo de conocer a Lauren y a su desarticulada familia, una que está ahora rota por el dolor, pero que desde antes de la muerte de May ya tenía muchos problemas, sus padres se habían separado, lo que obligaba a las hermanas a pasar una semana en casa con su padre y otra en el apartamento a donde su madre se había mudado.

Al morir su hermana mayor, su madre no se conformó con vivir en otro lugar, sino que cambió por completo de residencia y se mudó a California, dejando que Lauren, pasase la semana que lo tocaba quedarse con ella, en la casa de su tía Amy, su hermana, una mujer buena pero extremadamente religiosa y con tendencia a ser muy estricta, pues temía que Lauren siguiese el camino del pecado que había llevado May.

Ahora que Lauren empieza el instituto quiere averiguar quién es, y a través las cartas que envía a Kurt Cobain, Judy Garland, Amy Winehouse, River Phoenix o Heath Ledger, llegamos a conocerla mejor, a entender su relación con su hermana mayor, cómo la admiraba y quería ser como ella, cómo dependía de May para sentirse segura, cómo de pequeñas ella le aseguró que eran hadas, para ayudarla a superar sus temores realizando hechizos.

“Mucha gente desea llegar a ser alguien en la vida, pero tiene miedo de intentarlo por si no cumple las expectativas de los demás”.

Así que Lauren decide empezar a usar la ropa de su hermana para ir al instituto y reunir el valor para hablar con unas chicas y hacer así sus primeras amigas en el nuevo lugar, Natalie y Hanna. Nos relata también su primera conversación con Sky, el misterioso chico que le gusta, cuando se tropieza con él y Lauren nota que él lleva una camisa de Nirvana y le comenta que le gusta la voz de Kurt.

Amigos, amor, el primer beso, los desengaños amorosos, enfrentarse a la vida sin su hermana y guardando muchos secretos sobre lo que pasó realmente el día de la muerte de May, acompañaremos a Lauren durante el año muy duro, en el que acabará por descubrirse a sí misma y a pasar por las diferentes etapas del dolor, pero sobre todo a asumir que si queremos que alguien nos conozca realmente debemos expresarlo con palabras, por más difíciles que sea encontrar las justas, nadie puede ver qué hay en nuestro interior si no les dejamos.

Escrito de manera hermosa, mezclando música y poesía, Cartas de amor a los muertos es un canto a la vida, que es imprevisible; donde las cosas malas suceden cada día, pero en la que podemos quedarnos pensando solo en ello o avanzar. Trata también temas muy duros, como el abuso o el suicidio de una manera realmente asombrosa, sin pretender dar lecciones de moral. Una novela muy recomendable. 

¿Han leído Cartas de amor a los muertos? ¿A quién le escribirían ustedes?