El invierno de la bruja, de Katherine Arden

¿Qué pasaría si las narraciones que oías cuando eras una niña fuesen verdad? ¿Si los cuentos que escuchabas junto al hogar sobre señores del invierno, caballos mágicos, brujas y espíritus del bosque no eran ficción sino realidad? Una parte del mundo oculto que muy pocos pueden ver y que con la llegada de la religión se está perdiendo cada vez más. Hoy quiero hablarles de El invierno de la bruja, de Katherine Arden, el último libro de la fabulosa trilogía El oso y el ruiseñor. Unas novelas que nos llevan a una Rusia medieval llena de magia, monstruos y al borde de una guerra que podría acabar con todos.

«He visto que los cherti han quedado reducidos a sombras. Los hombres ahora ordenan sus vidas en torno al sonido de esas malditas campanas. Así que voy a derribar las campanas y, de paso, a derrocar al gran príncipe. Voy a prenderle fuego a todo este pequeño mundo que es la Rus y veré qué sale de las cenizas».

Dividido en cinco partes, el libro empieza justo después de ese épico final de La chica en la torre, cuando el fuego ha arrasado buena parte de Moscú. Aunque el incendio terminó por ser controlado, la gente furiosa de la ciudad busca un culpable. Y Vasia se convierte en la candidata perfecta luego de ser señalada como una bruja gracias a las acusaciones de cierto sacerdote que todos conocemos y odiamos a estas alturas. Si nuestra protagonista desea sobrevivir a todo ese odio, deberá seguir un camino que quizás solo la conduzca a otro tipo de muerte.

Un sendero a través de la Medianoche en el que descubriría que quizás la magia puede ser un regalo envenenado. Porque tener el poder de transformar la realidad a voluntad termina por llevar a la locura, ya que cambiar el mundo te hace olvidar lo que es real. Así que si desea mantener su cordura y salvar no solo a los cherti, esos seres mágicos que cada día están más debilitados, sino también a toda la Rus, deberá hacer aliados de lo más inesperados.

«Los hombres le arrebatarán todo lo salvaje al mundo, hasta que no quede ni un solo lugar en el que una joven bruja pueda esconderse. te quemarán a ti y a todas las que son como tú».

Todo ello mientras el rey del invierno está cada vez más debilitado por llegada del verano, y una amenaza letal se cierne sobre toda la Rus. Una que tiene que ver con otro poderoso ser que posee el poder de controlar a los muertos, y quiere sembrar el caos en ese pueblo que cada día olvida más al mundo oculto. Sin contar con que hay otro tipo de amenaza más mundana y real a la que el gran príncipe Dmitri Ivánovich debe enfrentarse también, la inminente guerra contra los tártaros. Un enfrentamiento bélico para derrotar a un adversario que él solo no puede vencer.

Este tercer libro está lleno de momentos épicos, y Katherine Arden nos hace sufrir junto a Vasia mientras la vemos crecer y evolucionar aún más. Enfrentarse a la pérdida, al miedo y al caos para encontrar su voz. Abrazar su verdadera naturaleza, con sus luces y sus sombras. Y convertirse en el punto de unción que ambos mundos necesitan, el de los hombres y el de los cherti. Pero no sin pagar un precio, uno muy alto, que es mejor que descubran al leer.

«La magia enloquece a la gente. Olvidan qué es real y qué no porque hay demasiadas cosas que se vuelven posibles».

Magia, brujas, secretos, guerra, aliados inesperados… El invierno de la bruja, de Katherine Arden, es un final de trilogía más que satisfactorio. Uno lleno de aventuras imposibles y de personajes inolvidables. Un libro en el que veremos a Vasia sufrir injusticias pero también enfrentarse a sus miedos y encontrar su lugar. Gracias de nuevo Nocturna por publicar esta historia tan especial y Maia Figueroa por su excelente traducción. Si están buscando libros llenos de mitos y que los lleve a una Rusia medieval llena de magia tienen que darle una oportunidad a esta trilogía.

¿Han leído El invierno de la bruja? ¿Les llama la atención?

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