¿Qué pasaría si de manera repentina aparece en tu diminuto apartamento una nueva estancia? ¿Si al abrir un viejo armario se materializa una amplia y hermosa terraza? ¿Qué ocurriría si ese mágico lugar solo se manifestara cuando te visita una persona en específico? Si comienzas a pasar horas y horas en ese espacio feliz sin saber que cada instante allí tendrá consecuencias no solo para ti y tu familia, sino para el mundo entero. Hoy quiero recomendarles Historia de una terraza, de Hilary Leichter. Una novela corta compuesta por cuatro historias independientes pero interconectadas que nos llevarán desde el presente no solo al pasado, sino también al futuro para que podamos observar como la aparición de ese lugar fuera del espacio y del tiempo cambió y reconfiguró toda la realidad.
«Abrió la puerta que normalmente daba al armario empotrado y dejó a la vista una terraza, decorada con tiras de lucecitas titilantes. Unas nudosas enredaderas crecían por los bordes, con sus ramificaciones, sus brotes y su veloz escalada por los costados del edificio».
La primera de las cuatro historias: Terraza, está protagonizada por Annie, una mujer que acaba de tener a su primera hija Rose, y que junto a su marido Edward se tienen que mudar de casa. Cuando les suben al alquiler, el matrimonio no puede hacer otra cosa que buscar un nuevo hogar, y aunque siempre han soñado con vivir en un apartamento amplio, incluso tener un espacio exterior con hierba para que juegue Rose o un lugar donde sembrar un pequeño huerto, solo han ido mudándose a pisos cada vez más diminutos que son los únicos que se pueden permitir.