Que Shirley Jackson es una de las mejores autoras de terror es algo que puede que todos ya conozcan. Aunque La lotería es quizás su cuento más famoso, la autora estadounidense no solo escribió novelas como La maldición de Hill House y Siempre hemos vivido en el castillo, sino muchas historias cortas más. Hoy les quiero recomendar Cuentos oscuros, una antología en la que podemos disfrutar de once de esos perturbadores relatos acompañados por las maravillosas y coloridas ilustraciones de Carmen Segovia y con la excelente traducción de Maia Figueroa Evans.
«Mientras el mal rondase sin control por el mundo, ella tenía el deber de asegurar que sus vecinos se mantuvieran alertas».
Empieza el libro con un cuento titulado La posibilidad de hacer el mal, en el que nos presenta a Adela Strangeworth que con 71 años vive sola en una ciudad pequeña. Una mujer mayor que tiene una casa con el jardín de rosas más hermoso y admirado de su localidad. El tipo de persona que se enorgullece de conocer a todos en el pueblo y de saludarlos uno a uno mientras hace sus recorridos. Y todo podría parecer ideal y muy normal pero da la impresión de que últimamente algo está perturbando a sus vecinos, y en los relatos de Jackson nada es lo que parece. No les puedo adelantar más para que se sorprendan como yo al leer la historia, pero les aseguro que ya solo por este cuento vale la pena darle una oportunidad a la colección.
Le sigue Louisa, por favor, vuelve a casa la historia en la que una joven planifica con precisión cómo escapar del hogar que comparte con sus padres y su hermana mayor, pero sin que podamos ni imaginar las consecuencias de esa decisión. El tipo de cuento que tiene unos giros inesperados y que te deja el corazón un poco roto. La historia que solíamos contar nos lleva juntos a dos amigas. Una de ellas acaba de perder a su marido y la otra la visita en su extraña casa familiar para tratar de animarla. Pero al día siguiente de esa reunión su amiga viuda desaparece. Tratar de descubrir qué fue lo que realmente le ocurrió nos mantendrá leyendo sin parar.
«Que sepas que no me marché de repente ni de improviso. Siempre supe que tarde o temprano acabaría escapándome y había urdido un plan con antelación para el momento en el que decidiese irme».
Luego con encontramos con Jack el Destripador, un relato tan corto y sorprendente que no les puedo adelantar nada con el fin de que como yo se maravillen al leerlo. En El bello desconocido nos topamos con una mujer que espera junto a sus dos hijos el regreso de su marido. Sin embargo, el hombre que llega de ese viaje de trabajo puede que no sea exactamente el que ella conocía y recuerda. El tipo de relato que está tan lleno de crítica social y que habla de temas como la opresión del hogar o de la soledad del matrimonio, es simplemente maravilloso.
Lo único que dijo fue «sí» es otra de mis historias favoritas. Nos presenta a una mujer que debe hacerse cargo de la hija de dieciséis años de sus vecinos cuando ambos mueren en un accidente de tráfico. Una jovencita que es la mejor amiga de su propia hija, pero que a ella no le cae muy bien. El tipo de narradora que se cree admirable y bondadosa, aunque nosotros como lectores sabemos que en realidad es mezquina y egoísta. Un relato que terminas con ganas de soltar una carcajada y aplaudir. ¡Qué idea! es la historia de una mujer felizmente casada que de manera repentina empieza a tener pensamientos muy extraños. Se preguntarán cuáles son esas ideas, pero es mejor que las descubran de primera mano para no arruinarles la sorpresa.
«Hoy necesito ver algo más aparte de las caras de mis hijos. Nadie debería estar solo tanto tiempo».
En La visita viajaremos junto a nuestra protagonista a la casa de campo de su mejor amiga. Un lugar hermoso e ideal en el que todo parece perfecto. Lleno de tapices y obras que celebran la hermosura del sitio. El tipo de hogar que parece sacado de un cuento, aunque entre todo el lujo y la luz esconde muchos secretos. La buena esposa es otra historia sorprendente, en la que nos encontraremos con un matrimonio que parece muy normal, sin embargo, está realmente lejos de serlo. Algo que iremos descubriendo paso a paso. Es todo tan retorcido como impresionante.
A casa nos presenta a una pareja que deja la ciudad para mudarse al campo ansiando un cambio de vida. El tipo de comunidad pequeña donde todos se conocen. Todo sería perfecto si de repente los lugareños advierten a la nueva inquilina nadie usa la carretera que conecta directamente su nuevo hogar con el pueblo cuando llueve. Advertencia que ella ignora solo para descubrir que hay un motivo muy real por el que evitar ese camino.
«Entre la lluvia, vio que parecían una anciana y un niño, y la lluvia los azotaba».
Cierra la antología Los del verano, la historia de una pareja mayor que decide alargar su estancia en la casa en el lago que alquilan todos los veranos un tiempo más de lo que hacen habitualmente. Ya que nadie los está esperando en Nueva York, quedarse más días en la casa apartada de todos parece una buena idea, no obstante, pronto descubrirán que quizás no lo es. Una historia que nos habla de la vejez y sus consecuencias de manera tan sutil que es imposible no quedarse de nuevo con el corazón un poco roto.
Crueldad, soledad, cartas, matrimonios que parecen felices pero no lo son, fantasmas, casas encantadas, predicciones ignoradas… Cuentos oscuros de Shirley Jackson es una antología llena de historias sorprendentes. Con relatos repletos de crítica social y que los maravillaran una y otra vez. La autora es una experta en mostrarnos el lado más oscuro y retorcido que pueden ocultar las cosas más mundanas. Esta edición con las increíbles ilustraciones de Carmen Segovia es la oportunidad ideal para descubrir a la autora si aún no lo han hecho o simplemente para seguir leyéndola si ya son fans. Si están buscando una lectura inquietante en la que nada es lo que parece tienen que darle una oportunidad.
¿Han leído Cuentos oscuros? ¿Les llama la atención?
Más reseñas de la autora:
No hay comentarios :
Publicar un comentario