Hay lecturas que te sorprenden tan gratamente que leer su segunda parte se convierte en una necesidad, eso me pasó con La Academia de Amelia Drake, un inicio de serie que reseñé hace unas semanas y me fascinó tanto que hoy quiero hablarles de su continuación: La Academia. Segundo libro, una novela que deja el listón tan alto como su predecesora.
“Llevaba encerrada allí abajo once días. Desde entonces no hablaba con nadie ni veía nada más que la mano que de vez en cuando asomaba por la trampilla del techo”.
Nos rencontraremos con Twelve, la joven huérfana que salió por primera vez de la Institución para Niños Especiales Edgar G. Estanislao, donde había sido abandonada cuando era un bebé para dirigirse a la Academia de Servicio, o eso creía ella. Pero el gran examen que decidiría todo su futuro determinó que ella sería una alumna ideal para la Decimonovena Academia de Danubia, la academia secreta, la que oficialmente no existía, la Academia de Ladrones.
El libro continúa pocos días después de que Twelve se ve obligada a regresar a la academia tras escapar junto a Ninon para poder cuidar de una niña de cinco años, que los directivos ahora usan como medio para obligarla a permanecer allí en contra su voluntad. Está recluida en la Cuarentena, ese sótano oscuro y húmedo que se usa para escarmentar a los alumnos indisciplinados, un lugar de pesadilla que deja secuelas en todos los que pasan por allí y permanecen mucho tiempo.
“No quieren ponerte a prueba. Ni tampoco castigarte. Quieren destrozarte. Porque escapaste de la Academia y luego decidiste volver: has violado todas las reglas de este lugar”.
Pero en los trece días que Twelve pasa allí en la oscuridad, recibe ayuda en forma de una nota que le dice qué hacer para mantenerse ocupada y también se da cuenta que la música que escucha cada noche, y que ella llama la melodía de la soledad, no es producto de su imaginación, hay alguien más prisionero allí y ella pretende averiguar quién es.
Cuando termina su castigo, Twelve toma una determinación, si tiene que estar en esa academia, será la mejor de todos, sin importar lo que cueste. Se quiere vengar de los profesores que la mantienen a ella y a Ninon cautivas, quiere encontrar un antídoto que le permita tener a la niña a salvo, sus planes para escapar aún no están descartados, solo necesita estar mejor preparada la próxima vez.
“No eran amigos, y probablemente nunca llegarían a serlo pero fuera de la Academia no podían permitirse el lujo de considerarse enemigos, porque sus verdaderos enemigos eran todos los demás”.
En la Academia de Ladrones nada es predecible, Twelve pronto se enfrentará a toda clase de problemas, y no solo con los profesores, sino también con sus compañeros, además se tendrá que preparar para su primer examen, un robo en la ciudad con todas sus complicaciones, allí reprobar implica que todos podían terminar en la cárcel o aún peor, muertos.
Misterios, venganzas, traiciones, alquimistas y trenes neumáticos, La Academia. Segundo libro es una continuación que nos permite conocer aún mejor a Twelve y a ese mundo tan peligroso y fascinante en el que le ha tocado vivir. De nuevo la traducción de Sara Cano es maravillosa, así que no me queda más que recordarles que si les gustan las aventuras, ésta es una serie juvenil que podrán disfrutar sin importar vuestra edad. Ya estoy deseando leer su tercera parte, y creo que a ustedes les pasará igual si le dan una oportunidad.
¿Han leído La Academia? ¿Les llama la atención?
Gracias a Boolino por el ejemplar.
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