Imaginen tener nueve años, estar a punto de morir en la horca y ser salvada en el último minuto. Rescatada de una muerte segura por la abadesa de Dulce Misericordia, un convento en el que entrenan a las jóvenes para que aprendan a matar. ¿Cómo sería vivir en un mundo que se está muriendo? En el que cada día que pasa el hielo gana terreno y solo una particular luna que cae impide que todo se congele y sea imposible vivir allí. Hoy quiero hablarles de Hermana roja, de Mark Lawrence, el Primer libro del Ancestro, una fascinante novela de fantasía con la que el autor inicia una serie alucinante. Un libro que me mantuvo pegada a sus 543 páginas y que va directo a mis mejores lecturas del año.
«Para matar a una monja es importante asegurarse de contar con un ejército de suficiente tamaño: contra la hermana Espina, del convento de la Dulce Misericordia, Lano Tacsis llevó doscientos hombres».
Dividido en dos partes, el libro nos cuenta la historia de Nona Gris, una niña que cuando la conocemos solo tiene nueve años y está condenada a morir en la horca. La pequeña fue castigada sin juicio previo junto a su mejor amiga por atacar y herir mortalmente al hijo de un importante y acaudalado noble. Un cruel luchador llamado Raymel Tacsis que estaba haciendo daño a Saida, así que Nona decidió atacar al gigantesco hombre con el fin de evitar que hiriera a la otra niña. Lo que no podía imaginar era que por ese ataque, en teoría mortal, ambas acabarían ahorcadas.
Cuando Nona está a punto de morir, llega a la cárcel la abadesa Vidrio, la máxima autoridad de la Dulce Misericordia, un convento en el que se entrena a jóvenes con el fin de que adoren al Ancestro y para que aprendan a matar. La llegada de la monja salva la vida de Nona, sin embargo, no evita la muerte de Saida. Por eso la chiquilla decide seguirla pero no confiar en ella. Su llegada al convento representa para nuestra protagonista una segunda oportunidad. A la niña no le gusta hablar de su pasado, de cómo llegó a la ciudad después de ser vendida en su pueblo y a formar parte de esa casa de lucha donde cometió un asesinato para defender a su amiga. La joven esconde un pasado plagado de violencia que terminará por encontrarla incluso allí, junto a esas monjas guerreras.
«La cólera tenía su lugar, era un arma que no se podía pasar por alto, pero lo mismo se podía decir de la paciencia, y Nona decidió que el control consistía en decidir cuál usar y cuándo».
Nona, ve como cambia su vida de la noche a la mañana. La manera en que ahora puede comer tres abundantes comidas al día, y no pasar frío. Empieza a tomar clases junto a las demás alumnas del convento, y pasa a formar parte de la Clase Gris donde no solo aprenderá a luchar sin armas de la mano de la Señora de los Cuchillos, sino que también conocerá las bases de esa religión en la que veneran al Ancestro, así como los fundamentos de la geografía de ese particular y helado planeta llamado Abeth, con sus muros de hielo, un sol moribundo y una luna que cae y es lo que aún permite la vida en ese satélite.
Pero quizás lo más importante que Nona aprenderá es que los habitantes de su mundo proceden de cuatro «tribus» diferentes, y que la sangre de cada uno de esos grupos originales le otorga habilidades especiales a sus descendientes. Los gerant se distinguen por su tamaño y su fuerza. Los hunkska por su asombrosa velocidad. Los marjal por ser capaces de practicar la magia menor. Mientras que los quantal son los únicos con la capacidad de recorrer la Senda y de emplear la magia mayor. Por eso tanto en los conventos como en la Academia o incluso en los centros de lucha como el que habían vendido a Nona buscan a niños que muestren características de que son poseedores de alguna de esas sangres de las cuatro tribus pues, a medida que crezcan y con el entrenamiento adecuado pueden emplear esas habilidades tan apreciadas. En casos muy raros hay personas que tienen dos sangres y esos dones duplicados, y una extraña profecía habla de la llegada de una persona que tendría las cuatro y cuyo destino es salvar a todos los habitantes del planeta.
«La lección más difícil que aprendí es que todo aquello que vemos a un amigo infligir a otra persona es algo que algún día nos hará a nosotros».
Veremos como paulatinamente Nona se adapta al convento y a sus normas. La manera en que va tomando clases y comprendiendo el funcionamiento de ese mundo y también de su decadente Imperio. Con su Emperador y las luchas políticas, con sus guerras y sus injusticias. La forma en la que empieza a hacer amigas, y cómo incluso en la seguridad del convento sus poderosos enemigos tratarán de acabar con ella. Porque una familia tan rica como los Tacsis no dejarán que una campesina como Nona ataque a uno de sus herederos y quede impune. Así que nuestra protagonista no solo deberá sobrevivir a su dura formación, sino también a la ira de un noble que tuvo que regresar de la muerte a su hijo a través de la magia y pagar el precio.
No les puedo describir la cantidad de aventuras, desventuras, aprendizajes y decepciones por las que tendrá que pasar Nona en estos primeros años en el convento. La veremos crecer y evolucionar, encontrar amigas y también perderlas. Esconder sus secretos, incluso sus habilidades y su verdadera naturaleza para tratar de encajar. El autor crea una historia tan adictiva que es imposible parar de leer, no solo por la complejidad de sus personajes o el funcionamiento de ese convento con sus hermanas guerreras tan particulares, sino también por fascinante y misterioso de ese mundo moribundo en el que se ambienta la novela. Por ese pasado en el que llegaron en naves y el Ancestro, por esa luna que los mantiene vivos pero quizás no por mucho tiempo más.
«—Nací para matar, los dioses me crearon para causar la desolación».
Monjas guerreras, un planeta moribundo, un imperio en decadencia, magia, el Ancestro, profecías, venganza… Hermana roja, de Mark Lawrence es una novela increíble y adictiva que nos presenta a una protagonista a la que queremos acompañar en cada uno de sus pasos. Que no solo tiene un grupo de personajes secundarios maravillosos (tanto las alumnas como las hermanas encargadas de su educación), sino también un mundo tan sugerente que estoy ansiosa por descubrir todos sus secretos. La traducción de Natalia Cervera está muy cuidada y estoy esperando con muchas ganas que salga la continuación. Después de ese final todo apunta a que lo mejor está aún por llegar. Si están buscando una historia de fantasía que los mantenga leyendo sin parar, con buenos personajes y una ambientación atrayente, tienen que dar una oportunidad.
¿Han leído Hermana roja? ¿Les llama la atención?
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