Gótico, de Silvia Moreno-García

 

¿Qué ocurriría si recibes una misteriosa carta en la que te piden ayuda? ¿Qué implicaría para una joven de la alta sociedad tener que trasladarse al campo para ayudar a su prima recién casada? ¿Y si la mansión que debería ser el nuevo hogar de la joven a la que consideras tu hermana mayor esconde oscuros secretos? ¿Hay fantasmas tras esas paredes mohosas? Hoy quiero recomendarles Gótico, de Silvia Moreno-García, una novela de terror fabulosa que estaba ansiando leer y que ha superado todas mis expectativas (que no eran pocas).

«Tienes que venir, Noemí. Tienes que salvarme. Ya me gustaría ser capaz de salvarme sola, estoy atada a este lugar, hilos fuertes como el hierro atraviesan mi mente y mi piel».

Ambientada en México en el año 1950, y galardonada con los premios Locus y Goodreads a la Mejor Novela de Terror, nos encontramos ante la historia de Noemí Taboada. Una joven de veintidós años que pertenece a la alta sociedad de Ciudad de México. Una muchacha glamurosa y despreocupada, que en un primer momento se nos presenta como un tanto frívola, que va de fiesta en fiesta y a la que no le faltan pretendientes con las que salir a bailar. Su ajetreada vida social se ve interrumpida cuando su padre le encomienda una misión.

El patriarca, tras recibir una misteriosa carta de Catalina, su sobrina recién casada, en la que asegura que la están envenenando y que escucha voces, decide pedirle a su hija Noemí que la visite. No solo para asegurarse de la salud de la muchacha, sino también de su estado mental. Las afirmaciones de fantasmas y susurros entre las paredes pueden parecer solo algo de melodrama de una chica que extraña su antiguo hogar, pero lo mejor es comprobar que no ocurre nada más que ponga a la familia en el foco de una atención pública no deseada. El padre de Noemí teme los escándalos y se siente responsable por Catalina, una jovencita a la que cuidó tras quedarse huérfana.

«—Los muros hablan conmigo. Me cuentan secretos. No los escuches, Noemí, tápate los oídos con las manos. Hay fantasmas, pero son reales. Tarde o temprano tú también los verás».

Noemí solo conoció muy brevemente a Virgil Doyle, el marido de Catalina. El matrimonio de su prima fue tan repentino y apresurado que la familia terminó por sentirse dolida. Así que temiendo por su bienestar, nuestra protagonista deja la ciudad y se dirige al campo para buscar respuestas en High Place, la mansión de estilo victoriano escondida en las inmediaciones de un pequeño pueblo minero llamado El Triunfo. La casa, al igual que la familia de ingleses que la habitaban, había conocido tiempos mucho mejores mientras que las minas de plata que controlaban estaban abiertas.

Así, cuando Noemí llega al hogar de los Doyle no solo se encuentra con una mansión ruinosa y una familia de férreas costumbres, sino con que su prima podría estar en una condición más delicada de lo que podía esperar, aunque en un primer momento ella misma lo niegue. ¿Realmente la tuberculosis podría explicar los delirios y las horribles pesadillas? ¿Qué secretos esconden esas paredes repletas de moho? ¿Qué ocurrió con la mina y sus trabajadores? ¿Qué misterios oculta el cementerio inglés detrás de la casa? ¿Por qué el patriarca parece ejercer tanto control sobre todos? ¿Qué implica esa fascinación que siente el mayor de los Doyle por la piel morena y las delicadas facciones de Noemí?

«Algunos cuentos de hadas terminan con sangre».

Tratando de encontrar respuestas y una segunda opinión sobre la condición de su prima, Noemí acudirá al pequeño pueblo cercano a la mansión. Allí descubrirá que la animadversión de los lugareños es casi igual a la que siente la familia Doyle por esos locales a los que consideran de una raza inferior. Entre tantos secretos y hostilidad disfrazada de buenos modales o tradición, solo en Francis, el primo menor de Virgil, nuestra protagonista encontrará una especie de aliado. ¿Pero realmente Noemí puede confiar en él? Cuando las pesadillas empiezan a invadir también el descanso de nuestra protagonista quizá ya sea demasiado tarde para encontrar una salida.

Secretos, horror, hongos, racismo, eugenesia, maltrato, colonialismo, cementerios, pesadillas… Gótico, de Silvia Moreno-García, es una novela de terror adictiva y muy bien escrita que se irá volviendo más oscura (y perturbadora) a medida que vamos avanzando. Con una ambientación sugerente y una protagonista tenaz que no se dejará amedrentar por las circunstancias. Repleta de referencias a la literatura gótica y a los cuentos de hadas, la escritora hace un trabajo excelente al subvertir el papel pasivo que tienen muchas veces los personajes femeninos en esos relatos, mientras hace una crítica social brutal. La cuidada traducción de Alexander Páez fue revisada y aprobada por la autora y yo me he quedado con muchas ganas de seguir leyendo a Silvia Moreno-García. Ojalá pronto tengamos más de sus libros en español. Si están buscando una novela de terror escrita con maestría y que los mantenga leyendo sin parar tienen que darle una oportunidad.

¿Han leído Gótico? ¿Les llama la atención?