Escuadrón, de Brandon Sanderson

Brandon Sanderson es uno de mis autores favoritos, así que el anuncio de la publicación de una nueva novela siempre es motivo de celebración y, como tiene un ritmo de escritura que muchos otros creadores deben envidiar, hay mucho donde elegir. Hoy quiero hablarles de Escuadrón, el primer libro de una nueva saga de novelas juveniles de ciencia ficción que el autor de Nebraska ha publicado para deleitar y conquistar tanto a sus lectores asiduos como a los nuevos que ahora mismo lo están descubriendo gracias a la fabulosa historia de Spensa. 

“—Antes vivíamos ahí afuera, entre las estrellas —dijo en voz baja—. Ese es nuestro hogar, y no estas cavernas”.

Spensa es una joven de dieciséis años que ha crecido con una única aspiración: convertirse en una de los pilotos que, diariamente, arriesgan su vida tratando de mantener a salvo lo que queda de la humanidad de los temibles krells (unos alienígenas que tienen, al parecer, como única misión en esta guerra sin fin de acabar con los humanos que encontraron en un viejo planeta deshabitado, al que llaman Detritus, un refugio para evitar la aniquilación). Pero, aunque Spensa se ha estado preparando desde que puede recordar para entrar en la escuela de pilotos, su pasado hará que sea prácticamente imposible acceder a ella. 

Para todos, Spensa es la hija de un cobarde, un piloto que en la batalla más importante de la historia del planeta entró en pánico y abandonó su posición, y que tuvo que ser abatido por sus propios compañeros. Ser la descendiente de un cobarde hace que crezca rodeada de burlas y humillaciones constantes, y ella quiere ser una piloto no solo para enfrentarse a los krells, sino también para tratar de limpiar el nombre de su padre porque ella está segura de que es imposible que lo que cuentan sobre él sea verdad.

“Lucharía. Resolvería el misterio de lo que de verdad había sucedido a mi padre. Y Férrea iba a arrepentirse de obligarme a hacer ambas cosas”.

Para no entrar en detalles que es mejor que descubran por ustedes mismos, digamos que solo por casualidad nuestra protagonista empieza su formación como piloto, pero no en las mismas condiciones que sus compañeros. Para ella todo será siempre mil veces más complicado, porque Férrea, una de los altos mandos del gobierno, solo quiere verla fracasar por ser hija de su padre. Así, enfrentándose a injusticia tras injusticia, Spensa puede al fin pilotar, solo para descubrir que las batallas reales en nada se parecen a las heroicas historias que le narraba su abuela a medida que fue creciendo.

Decir que Spensa llega a la escuela de pilotos tras una fachada de bravuconería y mal humor es quedarse cortos. Crecer entre insultos ha hecho que ahora sea agresiva y que hable como un personaje de las historias de héroes de su abuela, clamando por la sangre de sus enemigos, las lágrimas de sus viudas, por aplastar sus cráneos… y no puede ser más maravillosa. La veremos crecer e ir perdiendo parte de esa fachada, solo para ir descubriendo poco a poco quién es ella realmente. 

“—El sonido más maravilloso que existe son los lamentos de mis enemigos, chillando mi nombre a los cielos con sus voces quebradas y moribundas”.

Nuestra protagonista no estará sola, la acompañará un grupo de personajes secundarios asombrosos en el cual hay que destacar a Gali, su mejor amigo; a Cobb, su instructor en la academia; Jorgen, su jefe de escuadrón; y Kimmalyn, la peor piloto de su equipo, pero también la que tiene mejor puntería de todos ellos. Pero su favorito sin dudar es M-Bot, una nave averiada que Spensa descubre en una caverna y que está dotada de una inteligencia artificial que no recuerda exactamente cuál es su misión y que parece obsesionada con las setas. La nave es la protagonista de los diálogos más absurdos y divertidos de toda la novela. 

El mundo de Escuadrón está rodeado de misterios. Muchos de los archivos que contenían el pasado del asentamiento humano, que solo lleva unos setenta años en ese planeta desierto, se perdieron en los primeros ataques. Así que nadie está seguro de cómo empezó la guerra, quiénes o qué son los krells y por qué los atacan, o quiénes crearon las protecciones que rodean el planeta y que ahora caen como cascotes gigantes haciendo que la vida en la superficie sea prácticamente imposible y que no permiten ver las estrellas que se esconden detrás.

“—Reclama las estrellas, Spensa”.

Misterios, batallas espaciales, deseos de superación, injusticias, amistad, valor, sacrificios… Escuadrón es una novela sorprendente y repleta de acción que nos llevará a descubrir un mundo plagado de secretos que muchas veces es mejor no desentrañar y que pone de manifiesto una vez más lo inútil de la guerra y sus verdaderas consecuencias. Con unos personajes carismáticos y con diálogos repletos de humor, Brandon Sanderson ha creado una historia no solo adictiva, sino que también nos hace sufrir con su protagonista y alegrarnos con cada uno de sus logros. Estoy deseando leer su continuación, necesito más de Spensa y sus aventuras. Va directo a mis lecturas favoritas del año (y sí, solo estamos empezando enero).

¿Han leído Escuadrón? ¿Les llama la atención?