El Vals de las Hadas Malditas, de Gabriel Sánchez García-Pardo

Todos conocemos el poder de la música, su capacidad para transmitir y despertar las más diversas emociones, pero imaginen una canción tan terrible que, aunque oírla no hace ningún daño, tratar de interpretarla, así sea tarareándola, produce la muerte de manera inmediata. Hoy quiero hablarles de El vals de las hadas malditas, de Gabriel Sánchez García-Pardo, una novela de fantasía oscura con toques de novela negra que está repleta de aventuras y de personajes inolvidables. 

“Hay canciones que hacen reír y canciones que hacen llorar. Hay incluso canciones que pueden transportarnos a otros mundos. ¿Por qué te sorprende tanto que una canción sea capaz de matar?”

Nos encontramos en Éterdar, un territorio que hace casi veinte años sufrió la llamada Noche del Velo, un fenómeno en el que el mundo de los vivos y el de los muertos se fundió, dando paso a un invierno sin final y a días en el que solo se ve el sol durante unas tres o cuatro horas. En esa terrible noche todos aquellos que murieron quedaron atrapados para siempre en el mundo de los vivos, y aquellos que nacieron ganaron el favor de los espíritus, las hadas, y también de los demonios. 

Nuestra protagonista se llama Jillian y es una de las jóvenes que nació en la Noche del Velo y que fue apartada de su familia para ser entrenada en la torre del Westeun para ser desveladora. Es decir, para usar sus habilidades y conocimientos para resolver los más diversos crímenes. Pero toda una vida aislada y dedicada al estudio debe llegar a su fin cuando deba partir de la torre y separarse de sus antiguos compañeros y maestros para resolver su primer caso real: un extraño asesinato en la capital. 

“Ahí fuera aguardan demonios, espíritus impíos, muertos vivientes, hadas traicioneras… Criaturas que no se rigen por nuestras mismas reglas”.

Pero ni toda la formación de Jillian la pueden preparar para lo que encontrará al salir del que ha sido el único hogar que puede recordar. Los misteriosos asesinatos en la ciudad de Eastun son solo un punto de partida. La gente humilde está cansada del régimen que los gobierna con mano dura y puede que los rumores de la Rebelión de las Cinco Caras que recorre las calles sean mucho más que solo habladurías. Así que, aunque nuestra protagonista esté determinada a cumplir con su misión, la primera que se le asigna como desveladora tras su graduación, y resolver el asesinato del herrero, puede que las pistas solo le llevan a encontrar más preguntas.

Cada nueva pista significará viajar más lejos para obtener respuestas, y enfrentarse a los más variados peligros. Desde hombres despiadados y codiciosos a enmascarados que pueden revivir a los muertos, pasando por demonios que harían cualquier cosa para acabar con su aburrimiento. Pero Jillian no estará sola. La acompañará Vela, otra alumna destacada de la torre que como ella tiene su propia misión que cumplir y que por momentos más que una aliada parece su mayor enemiga. Así mismo, nos encontraremos también con Kelian Maze, un galante guardia que tiene que protegerlas a ambas; y con Raik, otro joven que parece estar huyendo y tener respuestas para algunas de sus dudas.

“Las ideas nos sobreviven a todos. Ellas son las que libran la verdadera batalla. Y las tuyas, los símbolos que te empeñas en defender, están a punto de expirar”.

Pero si hay que destacar a un personaje secundario por encantador tiene que ser a Döya, un extraño y juguetón ser feérico con el que se topan de camino a la ciudad y que pronto se transforma es su guía y aliada en ese mundo lleno de constantes peligros. Otro personaje del que me habría encantado conocer más es Lágrima, una de las asesinas que lidera la Rebelión de las Cinco Caras, y cuya habilidad la convierte en el tipo de enemigo con el que no te quieres enfrentar nunca. 

Hadas, demonios, espíritus, maldiciones, amor y desamor, ambición, el inicio de una revolución, los horrores de la guerra… El vals de las hadas malditas, de Gabriel Sánchez García-Pardo es una novela sorprendente que una vez empiezas a leer no quieres parar, y no solo porque el mundo sea maravilloso, complejo y decadente, sino porque tiene a unos personajes que te harán sufrir junto a ellos y también disfrutar con sus alegrías. Aunque sea una novela con una trama perfectamente cerrada, yo me he quedado con ganas de seguir acompañando a Jill en sus aventuras. ¡Ojalá tengamos más!

¿Han leído El vals de las hadas malditas? ¿Les llama la atención?