Reseña: Evelina

Autora: Frances Burney.
Título: Evelina.
Editorial: dÉpoca.
ISBN:  9788493897260.
Páginas: 580.
Precio:  27,50 €

Sinopsis:

Evelina, o Historia de una joven dama en su entrada en sociedad, cuenta la historia de la hermosa Evelina Anville, hija no reconocida de lord Belmont, un aristócrata inglés de vida disipada. Desde su oscuro nacimiento y tras la muerte de su madre al dar a luz, Evelina se cría aislada en el campo con su tutor, el bondadoso reverendo señor Villars. Cuando está a punto de cumplir dieciocho años viaja por primera vez a Londres, donde se ve cautivada por su nuevo entorno, el beau monde, y en particular por el apuesto y distinguido lord Orville. Pero su disfrute pronto se verá mortificado por la aparición de su abuela, madame Duval, y por el libertino sir Clement Willoughby.

Preciosa novela, en edición ilustrada (ilustraciones de época firmadas por Hugh Thomson), que describe de forma satírica los placeres y peligros de la alta sociedad inglesa y de la vida social londinense de finales del siglo XVIII.

A través de una amplia sucesión de cartas se relata la entrada de Evelina en un mundo frívolo y cruel repleto de falsas apariencias, enredos y malentendidos embarazosos.

Opinión personal:

Hay libros que al iniciarlos sientes que te estas reencontrando con un viejo amigo, en el que rápidamente sientes empatía por sus personajes y en el que la historia te atrapa con facilidad, pues el autor logra que quieras conocer todo los entresijos de ese mundo que ha creado. Evelina, o Historia de una joven dama en su entrada en sociedad, es precisamente una de estas novelas.

"Me pide opinión sobre ella. 

¡Es un pequeño ángel!"

Evelina es una joven hermosa, pero con un pasado un tanto oscuro, pues es la hija no reconocida de un aristócrata, condición que la obliga a ser educada en el campo por un bondadoso benefactor, el  reverendo Villars. Narrada de forma epistolar, en gran parte es gracias a las cartas que Evelina intercambia con su tutor, que lograremos conocer y ver como cambia su mundo tras su contacto con la sociedad, pues en su primer viaje a Londres, nuestra joven protagonista podrá contrastar la diferencia entre sus expectativas y la realidad. 

Tras el brillo de una vida llena de tardes en los teatros, visitas a la ópera y noches de bailes, hay una sociedad con unas normas tan rígidas, que no serán pocos los aprietos en los que se verá envuelta Evelina, por su total o parcial desconocimiento de las mismas.

Es precisamente en uno de esos bailes a los que asiste, en donde conocerá a Sir Clement Willoughby y Lord Orville, dos caballeros que representan las dos caras de la moneda, mientras uno es un libertino despreciable, el otro es un modelo de corrección y bondad. Dos personajes que acompañaran a nuestra protagonista y le harán sufrir más de una desventura. 

Otro de las principales causantes de los infortunios que deberá padecer nuestra protagonista, es madame Duval, su abuela materna, una dama con unos modales un tanto particulares, por decirlo de alguna manera y con unos planes en los que su nieta no tendrá más remedio que participar.

Durante la lectura, me pasó algo de lo más curioso, hay un momento donde Evelina recibe una carta que la deja totalmente indignada, el tipo de carta a la que una joven dama no debe responder, y que yo releí para tratar de comprender cuál era la ofensa. Si Burney no hubiese explicado luego cuáles son las normas que el autor de la carta estaba faltando y lo que ello implicada para una señorita, no me habría enterado nunca, porque actualmente sólo sería una carta común. 

Es fácil observar como Frances Burney influyó en la obra de Jane Austen, creando en Evelina lo que la Enciclopedia Británica define como un «hito en la novela social y de costumbres». Porque dejando a parte unas situaciones de los más inverosímiles que ocurren entre madame Duval y el capitán Mirvan, la novela es ágil, fresca, y nos permite ver la evolución de sus personajes, a la par que leemos una crítica a la sociedad donde les toca desenvolverse. 

Como todos los libros publicados por la editorial dÉpoca, es una verdadera joya, editado con esmero y acompañado por unas ilustraciones preciosas de Hugh Thomson que complementan al texto, y nos permiten adentramos aún más en ese Londres de bailes de salón.

En definitiva, Frances Burney logra crear una novela magnifica en el que se ve reflejada fielmente cómo era la sociedad londinense de finales del siglo XVIII, un retrato no sólo de los usos y costumbres de la época, sino también una crítica a la misma; y al papel que le tocaba representar a la mujer, a la cuál se le consideraba incapaz de tener una opinión propia. 

¿Han leído ya Evelina?