Se está muy sola en el centro de la Tierra, de Zoe Thorogood

 

Tenía mucho tiempo sin hablarles de una novela gráfica por aquí (ya que no leo tantas como me gustaría) pero para el #LeoAutorasOct quiero recomendarles Se está muy sola en el centro de la Tierra, de Zoe Thorogood. Una novela auto-bio-gráfica que la dibujante de cómics británica publicó en 2022 con solo veinticuatro años y por la que fue nominada a cinco premios Eisner y obtuvo el premio Russ Manning a la autora novel más prometedora. Una obra que tenía en mi lista de deseos desde que vi la recomendación de Bamf de Comic freaks y que compré a finales del mes pasado cuando leí en Twitter que la autora destinaría las ganancias de la venta del cómic hasta finales del año a instituciones que apoyen la salud mental y la prevención del suicidio después de que de perder a su hermano menor recientemente por esta razón.

El cómic tal y como nos explica Thorogood en una nota al inicio «incluye reflexiones personales y descripciones de intentos de suicidio y autolesión. Aunque espero que sea un consuelo para algunas personas, su contenido puede provocar emociones negativas. Por favor, léelo en un lugar agradable y recuerda que el sol siempre sale todos los días». La autora documenta durante seis meses su vida, en período en el que está pasando por una ruptura amorosa, un mudanza reciente, lidiando con el éxito que tuvo su primera novela gráfica y en el que debe seguir creando como artista porque es la única manera que conoce para sobrevivir.

«Si esto fuera una película, esta escena seria una presentación de la protagonista. 

Sería divertida, diría cosas en la fina línea que separa lo molesto de lo adorable.

Y la interpretaría una actriz mucho mas atractiva que yo.

Sería un drama vital, o una comedia romántica si me apuras...

Pero esto no es una película».

Es impactante la forma en que con solo las cuatro primeras páginas logra atraparte por completo. Un inicio potentísimo. Esa serie de viñetas están ideadas y dibujadas de forma que, sin importar que te acabes de leer la nota que advierte sobre el contenido, te impactan como un golpe a las entrañas. El uso que hace de las ilustraciones en blanco y negro, y luego las del color. La variedad de estilos en sus ilustraciones a lo largo del cómic. Los diferentes personajes que crea para contarnos su vida presente y su pasado son espectaculares. Ya que no veremos solo a la Zoe adulta que trata de seguir dibujando a pesar de lidiar con problemas de salud mental como la ansiedad, la depresión y el síndrome de la impostora. Sino también a la Zoe niña, esa que era tan “rara” y que desde los catorce años empezó a lidiar con la depresión y los deseos de suicidarse.

La autora nos cuenta que narra historias para darle sentido al mundo y que este libro nace como una manera de tratar de entenderse a ella misma (aunque la idea de una autobiografía suene narcisista). La pregunta de por qué no puede ser feliz le atormenta, y la acompañaremos entre el pasado y presente para tratar de encontrarle una respuesta. Pese a que está llena de momentos duros, a la novela gráfica no le falta el humor. La capacidad de Thorogood de burlarse de sí misma y de algunas situaciones hace que sea fácil sentirse identificada con ella (aunque eso a la artista le cause horror). En sus viñetas también encontraremos amor, pero no les quiero adelantar demasiado.

Descubrir cómo empezó a dibujar cómics y la forma en la que publicó su primera novela, así como leer lo extraño que se le hizo tener que lidiar con que las personas la reconocieran luego de publicar La inevitable ceguera de Billie Scott debido a que ella siempre había sido una solitaria. Algo que te hace reflexionar sobre la persona que hay detrás de una etiqueta tan grande como “el futuro del cómic”. Especialmente si solo tiene veintipocos años y nunca se ha sentido cómoda dentro de su propia piel y tanto éxito no es algo para lo que te puedas preparar.

Thorogood nos relata que se siente realmente bien mientras dibuja y crea historias para conectar con las personas, sin embargo, el problema se le presenta cuando debe volver al mundo real. Ese en el que tiene que convivir con una depresión heredada del lado materno de la familia. Ese monstruo aterrador que le acompaña y del que nadie quiere hablar. Porque aun cuando ella sabe que no es su depresión, a veces le reconforta creer eso.

No debe ser fácil transformar en viñetas tantos sentimientos incómodos, la ansiedad, la depresión, la soledad, el síndrome del impostor o el desamor, sin embrago, Se está muy sola en el centro de la Tierra, de Zoe Thorogood lo consigue de manera espectacular. Si están buscando una historia real que ponga el foco en lo importante que es la salud mental tienen que darle una oportunidad. Un testimonio personal sobre el arte y su poder que derrocha ingenio y amor por el cómic. Yo me he quedado con ganas de leer todo lo que publique la autora. Me encantó su estilo, así como el humor y el ingenio con el que trata temas tan espinosos. Esos que mucha gente prefiere ignorar que existen porque son perturbadores o demasiado dolorosos para compartirlos.

¿Han leído Se está muy sola en el centro de la Tierra? ¿Les llama la atención?