¿Cómo cambiaría tu vida si de manera repentina te convirtieras en sospechoso de participar en un ataque terrorista? Si terminaras encerrada en una prisión, luego de presenciar la forma en la que un disparo impactaba de lleno en tu compañera de vida. Preguntándote si la persona a la que amas está viva o muerta y acusada de participar en la explosión de un almacén de comida. Si vives en un mundo al borde de la guerra luego de doscientos años de frágil paz. Hoy quiero recomendarles Fuga en luz mayor, de Laura S. Maquilón. Una alucinante novela de ciencia ficción completamente independiente, pero que está ambientada en el mismo universo de Concierto en sol menor.
«La vida no transcurre durante el tiempo, sino fuera de él. En esos intersticios en los que todo se detiene y ya nada vuelve a ser como antes. En ese último momento en el que el cuerpo se desplaza lo suficiente como para no recibir el disparo».
Esta novela coral tiene como protagonista a Ryu-ji; ella es una ingeniera que vive en Kitan, un planeta alienígena profundamente religioso que mantiene un frágil equilibrio entre la luz y la oscuridad. Desde hace dos siglos, Kitan vive en una endeble paz con tseyikis, un pueblo vecino con el que los kitanis tienen mucho más en común de lo que a ellos les gustaría reconocer. El problema es que parece que la guerra ahora es inevitable. Luego de un año de mucha sequía y malas cosechas, un almacén lleno de comida explota en un ataque que los locales creen que es obra de los tseyikis que viven en el planeta.
Así que, con el objetivo de encontrar a los responsables del ataque terrorista, se empiezan a encarcelar a los tseyikis. A Ryu-ji también la encarcelan porque estaba con su novia Eu’gal y ella es una comerciante del planeta vecino. Ambas se encontraban cenando en un restaurante cuando un disparo impactó a Eu’gal, y fueron separadas sin que la ingeniera sepa qué le ocurrió a su amada, si está viva o muerta luego de la agresión. Ella está segura de que Eu’gal no tiene nada que ver con la bomba en el almacén, y logra salir de su cautiverio no porque las autoridades confíen en que ella no participó en el ataque, sino gracias a que una de sus hermanas de nido logra sacarla.
«El odio no dejaba espacio para el pensamiento racional; era voraz e insaciable y solo permitía el paso de aquello que lo alimentara. La información era la única arma que poseían contra el odio. Y, como diría Hae-bo, esa información circulaba manchada de mentiras».
Los kitanis son una especie con forma insectoide y, al crecer, viven en nidos, hasta que eligen nuevos compañeros y forman sus propias familias. Así que, junto a Ryu-ji, los otros narradores del libro serán sus hermanos del nido. Todos con personalidades muy diferentes y pertenecientes a las diversas facciones que conviven en ese planeta. Pues según la religión que allí profesan, Kitan tienen un alma llamada Waqaoki, y dependiendo de a qué facción forman parte, sus creencias serán más o menos rígidas e inflexibles con respecto a cómo tratan a los extranjeros a los que muchos consideran herejes.
(Diferentes facciones que podemos encontrar en Kitán)
A través de las diversas facciones podremos ver cómo cada grupo interpreta el ataque terrorista de manera diferente. Y Ryu-ji deberá elegir a qué bando apoyará en ese conflicto inminente. Si se mantendrá con sus hermanos y los kitanis, o si se pondrá del lado de los tseyikis incluso aunque Eu’gal ya no esté a su lado. ¿Y ellos aceptarán la ayuda de una kitani mientras el resto los trata como a peligrosos criminales, aún cuando no hay pruebas de que estén planeando una nueva guerra? Su decisión acarreará graves consecuencias, unas con las que tendrá que aprender a vivir.
«Sí, las crisis producían cambios. Que fueran buenos o malos solo podría juzgarse en el futuro».
Es fascinante la manera en la que Maquilón nos presenta a la sociedad kitani, la primera que exploró el espacio en ese universo llamado Warakum que ha creado y en el que ha ambientado ya dos novelas y otros tantos relatos. La religión de Kitan es tan compleja y deslumbrante como las diferentes facciones que pueblan ese delicado planeta. Ver la forma en la que el extremismo religioso lleva a cometer atrocidades nos recuerda mucho más a nuestra sociedad de lo que podríamos pensar en una historia protagonizada por insectos gigantes. Pero se demuestra una vez más que la ciencia ficción es una herramienta poderosa para hablar de nuestro presente y Maquilón lo consigue con una maestría que es de admirar.
Fanatismo, opresión, xenofobia, odio, identidad, pertenencia, familia… Fuga en luz mayor, de Laura S. Maquilón, es una novela maravillosa de principio a fin. Una historia de convivencia, de tolerancia y de espiritualidad. Que nos recuerda lo complicado que puede ser mantenerse en el lado correcto de la historia, porque por lo general implica pagar un alto precio. Una obra que además tiene un arco de redención precioso para uno de los personajes que más odiosos me pareció al principio (y que tienen que conocer). No quiero terminar sin hacer una mención especial para esa espectacular cubierta obra de David G. Vaquero. Si están buscando una novela de ciencia ficción con un universo complejo y alucinante, así como unos personajes memorables, tienen que darle una oportunidad.
¿Han leído Fuga en luz mayor? ¿Les llama la atención?
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